CONSTANTE INCONSTANTE

No se si alguna vez os habéis encontrado con algo o alguien que sea una constante inconstante en vuestras vidas.

Algo que encontráis y olvidáis, volvéis a encontrar, volvéis a olvidar y de repente una canción o un que se yo os lo devuelve.

No es algo que se haga queriendo ni mucho menos algo que se haga sin querer, simplemente es algo que ocurre. 
Como los accidentes que no se pueden evitar.

Una constante inconstante en vuestras vidas que va y viene y cada vez que viene te despeina, te sacude de los pies a la cabeza, te agita la vida entera. 
Pero sabes, porque eso lo sabes de sobra ya, que inevitablemente acabará volviéndose a ir. 
Es recomendable no encariñarse demasiado, no vaya a ser que en una de esas idas y venidas algo acabe rompiéndose de verdad.

Me viene a la memoria un libro de Bryce Echenique que leí hace muchos años, se titulaba " La amigdalitis de tarzán".  Ese libro sería el resúmen perfecto de lo que es una constante inconstante. Un llegar a un lugar, a una situación o a una persona a destiempo...Siempre. 

Para mi podría ser la escritura o los instantes creativos...
Podría ser la estación La Gare D´austerlitz en París, donde me senté hace tantos años a esperar un tren que nunca llegó...el mismo tren que años después mi constante inconstante tampoco llegaría a coger. 
O podría ser una simple palabra como esa misma palabra...coger.

Cosas sin sentido pero que en el fondo, y lo sabemos bien, lo tienen.